El Reglamento General de Protección de Datos está suponiendo un notable quebradero de cabeza para todas las empresas digitales. Especialmente, en aquellos casos en los que nos encontramos con grandes multinacionales que son capaces de aglutinar grandes cantidades de datos, como es el caso de Google, o en aquellos casos en los que hacemos referencia a redes sociales, como Meta o Instagram.

Tras los 746 millones de euros que tuvo que abonar Amazon, ahora es turno de Instagram. En este caso, nos encontramos ante una sanción histórica. Siendo la segunda por cantidad: 405 millones de euros por haber violado el marco legal mencionado previamente. Para ello, se ha analizado el comportamiento de la plataforma durante los últimos meses. Concretamente, su actividad desde el año 2019.
Violación de la privacidad en usuarios menores de edad
No se han hecho oficiales las causas por las que se ha llevado a cabo tal multa. Sin embargo, todo apunta a que se ha ejercido una violación de la privacidad en aquellos usuarios que son menores de edad. Por tanto, nos podríamos encontrar ante una filtración de un número de teléfono, una dirección de correo electrónico o cualquier aspecto relacionado con esta cuestión.

En un intento por derribar la sanción, Meta ha afirmado que todos los menores que tienen cuenta en la aplicación tienen la máxima privacidad en la misma. Siempre y cuando, por supuesto, no se salten los controles de menores de edad con los que cuenta la aplicación y proporcionen la información veraz. Tal y como se ha afirmado:»Cualquier persona menor de 18 años tiene automáticamente su cuenta configurada en privada cuando se une a Instagram, por lo que solo las personas que conocen pueden ver lo que publican, y los adultos no pueden enviar mensajes a los adolescentes que no los siguen. Nos comprometimos plenamente con el DPC a lo largo de su investigación, y estamos revisando cuidadosamente su decisión final«
El problema de las redes sociales y el público menor
Si bien es cierto que para las redes sociales el público menor de edad supone una notable oportunidad para comenzar a fidelizar usuarios, la realidad es que también atañe grandes riesgos en los modelos de funcionamiento. Para ello, es importante tener en cuenta que Instagram ya tuvo que cancelar años atrás su iniciativa de Instagram Kids, una red social que heredaba las mismas funcionalidades que su hermano mayor, pero con ciertas limitaciones en su uso.
Tik Tok, por su parte, es otra de las apps que está siendo examinada con lupa por los mismos motivos que Instagram. Por lo que también permanece alerta a cualquier violación que puede llevar a cabo desde el momento en el que un nuevo usuario menor de edad se registra.